Necesito ayuda
En el curso de experto universitario (que cada vez me interesa menos) que hago con la UNED me han puesto un trabajito para este finde que tiene tela. Nada menos que comentar si el hombre es imprescindible como rol paterno. Cada vez me ralla más el feminismo y sus radicalismos pero todo sea por el cv.
Y encima el tema para alguien de mi edad, soltera, sin hijos y con ideas algo liberales pues puede parecer idóneo, pero lo cierto es que a mi entender, en mi necesidad individual, la familia no es una conquista social aunque en términos de rentabilidad en la composición del mundo lo sea, y debe responder a una fórmula de amor que se elige libremente y por tanto no hay modelos únicos para ello. Todo vale si sale del amor y no del egoísmo, si sale del deseo profundo de compartir una vida en común en compromiso con otras personas, y no vale de ninguna manera si se trata de ceder a las presiones sociales, al miedo a la soledad etc. Y miedo tenemos todos, hay mucho miedo. Y no necesito explicar esto a través de teorías feministas, filosóficas, se trata de mi trayectoria como ser humano que ha leído, vivido, amado, sufrido y ha sido testigo de la vida de otros muchos seres con los que ha ido interactuando, en definitiva, que me sale de las entrañas y no hay mucho más que racionalizar. Ayer vi la obra de teatro "Argelino" que toca de lleno todo esto y transmite de una forma espectacular esta manía del ser humano de evitar el miedo a la muerte a través de conductas muy destructivas.
Lo pongo aquí por si me podéis ayudar en ofrecer ideas para comentarlo, teorías que priman el instinto, la evolución de las normas y modelos familiares etc. Y como es un tema que puede crear controversia y debate pues ahí lo lanzo :
"Los padres, hasta muy recientemente, han sido el miembro desaparecido de las familias. La teoría de los roles atribuye a los hombres el rol de ?ganapán? , él será el que proporcionará el sustento a toda su familia, además será el fuerte, el sobreexcitado sexualmente, el que en definitiva juega el papel instrumental dentro de las relaciones familiares. De alguna forma y a pesar de ser considerados como opresores, en las sociedades patriarcales podríamos considerarles víctimas de su propio rol. De él les va a costar mucho salir por que lo tienen muy arraigado y van a precisar ayuda por parte de las mujeres.
Ni en las revistas que se editan con el objetivo de resolver los problemas que se presentan ante la crianza y la educación de los hijos, ni en los estudios sobre familias, divorcio, parentalidad, aparecen los padres como sujetos hasta la década de los 80 del siglo pasado. Richard Gelles cree que no es un descuido sino el legado de la teoría freudiana debido a dos principios. El primero es que las mujeres transmiten muy bien a los niños lo que los padres opinan y el segundo es que los padres no son importantes en la crianza. Las madres son importantes en el principio de la crianza y los padres son sólo necesarios en etapas posteriores.
Según José Antonio Marina sin embargo no es necesario buscar una explicación a este fenómeno sino que lo describe como un producto natural y social. En los hombres el deseo de tener hijos se debe a la ?presión social? pero no al instinto, mientras que en el caso de las mujeres, poseen un gran deseo natural e instintivo de ser madres .
A pesar de que los estudios de los psicólogos entre los años 1950 y 1980 refuerzan el vínculo ya que estaría biológicamente programado y es con la madre, si embargo si se analizan los comportamientos de los animales en la naturaleza se puede ver que en muchas especies el padre tiene un papel en la crianza a través de la alimentación de las crías.
Hay una serie de medidas, en nuestras sociedades, que promueven tanto la paternidad activa como el permiso de paternidad, o los horarios flexibles y el movimiento al que se han visto obligados al salir la mujer fuera de casa que ha empujado a los hombres a entrar en el hogar. Pero todavía hay un lado oscuro sobre el padre moderno.
Si bien ha sido el divorcio el que ha despertado la reclamación de la paternidad de los hombres. Los hijos por las circunstancias sociales han sido generalmente entregados a las madres mediante sentencias favorables. Esto resulta muy lógico en el contexto de un discurso, que como estamos viendo, centró la parentalidad en las mujeres, como consecuencia las sentencias apoyan esta realidad social y entonces los padres, agraviados por perder el poder sobre sus hijos, han reclamado su derecho a la paternidad.
Durante muchas etapas históricas los hombres han dejado mujeres embarazadas sin hacerse cargo del niño o niña, históricamente en sociedades en las que había un fuerte rechazo a esta situación social. Las pruebas de paternidad, han cortado radicalmente con esta práctica y se ha pasado a la contraria. Sin embargo una sociedad madura admite las familias monoparentales o monomarentales como algo normal.
No parece lógico reivindicar una figura concreta como imprescindible en el interior de las familias, ya hemos definido la gran variedad de estructuras familiares que coexisten en la actualidad. Decir que la figura del padre es imprescindible, es muy difícil de resolver en el caso de los huérfanos, de lo que se trata es de que si hay dos adultos se corresponsabilicen en los cuidados de los bebes y si no los hay, puede haber otras personas sean o no padres y madres biológicos que servirán de referencia a los niños y niñas."
9 comentarios
limoncello -
gracias por tan interesante explicación, post.
nieves -
A lo que vamos, la educación de los niños recae grandemente en las mujeres y de forma anecdótica en los hombres. Las hembras allá asumen la responsabilidad de trabajar, ser propietarias de las viviendas y responden a la presión social teniendo niños muy jóvenes. Ellas los crían y ellos se convierten en cuasi artículos de lujo a los que hay que subvencionar y mantener el máximo tiempo posible al lado, asumiendo como inevitable que no será mucho.
A pesar de este contexto y de sus escasas excepciones en las islas los niños necesitan y reclaman la figura paterna. Yo estuve allí con un amigo en el 92, conocí a toda su familia y a muchos de sus amigos y descubrí a uno de sus hijos de los que no se ocupaba en absoluto. Este chavalín tenía unos 7 u ocho años y no había visto a su papá, que en esa época vivía en París (volvió hace años a Guadeloupe)en los últimos 4 años de su corta vida... El crío lo reconoció de un vistazo en casa de su tía a pesar de que no contaba con verle allí, fue una total sorpresa para la madre, para él y para mí. Y me odiaba por competir con la atención de su papá desde el primer instante (blanca debilucha!!!, me insultaba bajito.) Celos aparte su padre ejercía de tal a base de voces y ordenes tajantes y yo flipaba pero el crío le adoraba y ese es el punto de reflexión.
Tu dices que tienes más amigos que amigas..., yo creo que necesitamos la referencia de los dos sexos y el amor de todo el mundo para crecer seguros de nosotros mismos.
Un besote
Toni -
limoncello -
Yo también pienso que lo ideal es criar a un hijo entre un hombre y una mujer que siempre van a complementarse. Pero las parejas de mujeres están demostrando (muchas menos que de hombres que no tienen tanto impulso inicial de paternidad y se planteen hacerlo solos) que en esos hogares se puede respirar el mismo soporte afectivo que en los de una pareja heterosexual.
Uff esto da para mucho y podría seguir pero hoy tengo mucho curro.
besote Gio, nos tomamos cuando se de la oportunidad ese vino.
Gio -
Por un lado sé que en épocas pasadas la labor de crianza de los hijos no era exclusiva de la madre, sino de toda la comunidad. En casi todas las culturas primitivas, se hacían el equivalente a "casas de niños" (con todos los nombres inimaginables) en las que los ancianos y las mujeres embarazadas, recién paridas o en condiciones similares, cuidaban a todos los niños, mientras las madres recolectaban comida y los hombres salían a cazar, a guerrear o a emborracharse ceremonialmente (que tiene su lado divino aquello de los efluvios etílicos).
Esto siguió más o menos igual aún con el medioevo, aunque en este caso la familia extendida o la comunidad del "barrio" en el burgo correspondiente hacían las veces de cuida-educa-infantes.
Y luego vino la revolución industrial y la celulización de la familia. Debido a las migraciones, era cada vez más frecuente encontrarse familias "sin apoyo" que se defendían solas de la vida y ahí los hermanitos cuidaban unos de otros (esto también pasaba antes, pero menos).
Sólo ahora, en los tiempos del progreso electrónico, las quiebras financieras pantagruélicas y el bonvivantismo cultural, llegamos a la atomización máxima. La familia monoparental es una realidad en todo el mundo, aunque se vive muuuuuy distinto en el primero y en el tercer mundo.
Una niña o niño, tienen una gran cantidad de energía y, por otro lado, el adulto promedio requiere ganarse el pan de una u otra manera, así que ambos objetivos (el pan y el infante) compiten despiadadamente entre sí por la atención del adulto. Bajo este esquema es completamente racional el buscar ayuda en la crianza. Si la "ayuda" en cuestión puede además amar al infante ¡cuánto mejor! pues el amor es indispensable en las etapas tempranas. Más que la proveeduría, que está tan sobrevaluada. Un niño alrededor de los 7 años es, en mi experiencia, casi indestructible y no necesita mucho para ser feliz: basta con saberse amado y protegido.
De ahí que el rol de madres y padres sea una cuestión más bien abstracta. Yo creo en el amor de pareja y creo que ahí es el lugar idóneo para educar a un niño/a. Y no creo que los roles entre "hombres" y "mujeres" se estén desdibujando. Creo que algunas actividades ahora van probando que pueden realizarse de manera mixta, pero existe un algo indefinible en la mujer y en el hombre que no es aprendido. Es parte esencial de su ser.
Y ya me extendí muuuuuchísimo. ¡Qué buen tema! ojalá te vaya muy bien con tu presentación!
Gio.
limoncello -
Por ahí va mi argumentacion del texto, mas en la línea de lo que le conviene al niño y no a los adultos.
Leonhard Euler -
limoncello -
anonimo -